EL ABRAZO




Me transmitió mucho amor cuando me rodeó con sus brazos, fue un abrazo tierno, dulce que me emocionó. Venía a comer conmigo a celebrar la vida que pasa y te llena de responsabilidades, algunas de ellas especialmente bellas, es la mujer de mi vida, me desveló por ella por eso cuando me abrazo toque el cielo con las manos, a estas alturas muchos habrán descubierto de que estoy hablando de mi hija Paula, no hace mucho  me regaló un abrazo de los que te ponen todos los huesos en su sitio y te esponjan el alma.
La niña de mis ojos, la que. cuando tuve por primera vez en mis brazos, me hizo saber lo que es estar dispuesta a dar la vida por el otro, hoy ya tiene diecinueve primaveras, compartimos gustos y también diferencias frutos de la edad de cada uno como es normal.
Cuando me abraza de esa manera, sabes lo que es el cariño sientes orgullo de ser padre.
Muchas cosas hemos pasado juntos, buenas y no tan buenas, pero siempre hemos permanecido unidos aunque no estuviéramos juntos, un hilo invisible, robusto y firme ha unido nuestros corazones desde que nació, que ni la distancia ni las circunstancias han podido romper.
En ese abrazo se sintetizó la vida de una hija y un padre, fue un momento maravillosamente profundo.

Alberto López Escuer

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