RICHARD JEWELL





Estamos ante la última película de Clint Eastwood, que es una denuncia al
abuso de poder y la falta de algunos periodistas. Richard Jewell guardia
de seguridad en los Juegos Olímpicos de Atlanta 1996, pasó de héroe a
villano en un lapso de pocos días, encontró una bolsa de explosivos en el
Centennial Park y de ser aclamado por su acción pasó a ser el sospechoso
principal del atentado que tuvo víctimas mortales. Una filtración indebida
de una agente del FBI y una periodista que no contrasta la información,
ponen en el ojo del huracán a Richard Jewell , una persona, aficionada a
las armas y con un celo excesivo en ocasiones, del cumplimiento de la ley.
Se ve desbordado por la situación. Basada en hechos reales, Clint
Eastwood construye un relato sólido, con unas interpretaciones
sensacionales y veraces de Paul Walter Hauser  encarnando a Richard
Jewell , de Sam Rockwel como Watson Bryant, abogado de Jewell; muy
destacable es la interpretación de Kathy Bates como madre de Richar
Jewell. Una película que pone el ojo en la excesiva obsesión de conseguir
un culpable, aunque no se tengan las pruebas suficientes, por parte de los
agentes del FBI en este caso y la ambición de algunos periodistas por
conseguir un buen titular, sea como sea aunque se destruya la vida de una
persona. Un film sólido que no deja indiferente a nadie cosechando críticas
y alabanzas a partes iguales, luego se demostró que era inocente pero el
infierno vivido esos días solo lo saben Richard Jewell -fallecido en el 2007-
y su familia.

Alberto López Escuer


Comentarios

Entradas populares de este blog

QUIERO HECHOS, NO PALABRAS. SI QUIERO PALABRAS, ME LEO UN LIBRO

SARA MORTENSEN, O EL TRABAJO BIEN HECHO

JOSEAN, EL HOMBRE SERENO