LA PALABRA DESENCADENADA

Con un país en estado de alarma sanitaria y confinado en sus casas, una capilla de Madrid, concretamente la parroquia San Francisco de Borja se convirtióen una comunidad virtual donde cabían todos.Se celebraba la eucaristía, se rezaba y se compartían estados de ánimo. Como el lector puede imaginar había de todo, buenos momentos compartidos, también dolorosos, llenos de incertidumbre. Cada uno en sus casas pero unidos por esta iglesia. Fue una manera de dar respuesta por parte de los Jesuitas de España.#encasaconDios, esa era parte de la propuesta  a estos meses tan extraños y que nos tuvieron con el corazón en un puño.Una comunidad cristiana virtual donde se compartió, eucaristía, palabra y vida de marzo a mayo, meses que nunca se nos borraran de nuestras mentes, fueron muy duros.

Todo esto cuenta este libro, la eucaristía vivida diariamente, la homilía y poemas adecuados a la situación, que hacían de eco de las lecturas escuchadas en la eucaristía.Una invitación a ver a Dios en la realidad cotidiana que nos rodeaba, por muy dura que fuera -que lo fue y lo sigue siendo - un Dios que nos consolaba, nos ayudaba y al que veíamos en el rostro del buen samaritano convertido en sanitario, bombero, cajera de supermercado...También en la soledad del que moría en la habitación de un hospital. Él le daba la mano y le decía: no estás solo estoy contigo. Un libro que habla del amor de Dios a la humanidad.

 

Alberto López Escuer