Víctor Orúe es de esas
personas que si no hubieran existido habría que haberlas inventado. El mundo hubiera perdido a una persona honesta, auténtica y amigo de sus
amigos. Uno tiene el honor de conocerlo y puedo decir con orgullo que su
amistad me hace mejor persona.
Defendió con éxito los colores de la
S.D. Huesca. Un defensa con todas las cualidades para triunfar, como así hizo.
Bombero retirado, siempre estuvo dispuesto a ayudar a los
demás, es un gran tipo, también gran aficionado al buceo.
Todas estas actividades
las hizo y las sigue haciendo, algunas de ellas con pasión, dando lo mejor de sí en
cada una de ellas.
Pero destaca por ser un
gran esposo y un magnifico padre. Ha formado una familia muy bonita. Víctor ha tenido suerte en
ese aspecto, han sabido formar junto a su esposa un núcleo familiar estupendo.
Lo que es genial es que
por mucho que tardes en verte, con Víctor, es como si solo hubieran pasado unas horas. Es un hombre acogedor, lo
que se dice muy buena gente.
Estas líneas son un justo homenaje de
un amigo a otro. No hay que esperar momentos no deseables para dedicar buenas
palabras al amigo.
Un pequeño homenaje a un
gran hombre. Es una suerte contar con una persona así en tu vida, como yo cuento con Víctor.
Un hombre que trasmite
serenidad, de amplia sonrisa, con unos valores bien arraigados que los
transmite de una forma natural. No le cuesta ser buena persona, pues es su
esencia. Se puede decir que Víctor es un hombre que pasa por la vida haciendo el
bien.
Su influencia es positiva
para quien está a su lado, trasmite mucha positividad.
Es un oscense nacido en
San Sebastian. El equipo txuri urdin le
tira mucho. Siendo joven entrenó con los Arconada, Satrustegui, Zamora… lo cuenta sin darse la
menor importancia -otros lo harian de otra forma-.
Víctor, un hombre sencillo,
honesto y honrado. Gracias por tu amistad.
Alberto López Escuer
Muchas gracias Alberto, me has emocionado, te mando un abrazo enorme amigo.
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