Y COMO QUIEN NO QUIERE LA COSA, LLEGA 2023
“Y en el reloj de antaño, como de año en año
Cinco minutos más para la cuenta atrás
Hacemos
el balance de lo bueno y malo
Cinco
minutos antes de la cuenta atrás”.
¿Quién
no ha cantado alguna vez esta canción de “Mecano” que nos habla de un año más? Pero una cosa
es cantarla y otra ver cómo se hace realidad el paso del tiempo y no solo un año
sino muchos más -que por otra parte está muy bien-. Parece que hace poco tenías
poco más de veinte años y como si fuera un suspiro te ves
con más de cincuenta. Antes eras un chaval que se comía el mundo y ahora eres
un señor -así me llamaron el otro día en el autobús-, que te ceden el asiento.
Un señor que ya se come, si le dejan, la esquina de su calle, eso con suerte.
Un día
de tu niñez con los de la cuadrilla de juegos calculabas cuántos años tendrías
en el mítico año 2000. Ahora te encuentras escribiendo
sobre el año 2023 que ya está aquí.
Mi madre
tenía un dicho con el que estoy muy de acuerdo: “hijo mío
el problema de los años es no cumplirlos”. Cuánta razón tenía.
Aquí estamos
despidiendo el año 2022 en donde ha habido de todo, volcanes, guerras, crisis,
subida de precios…Pero aguantamos el tipo como podemos y procuramos hacerlo de
pie y mirando a los ojos a todos los problemas. Tenemos unos políticos que
parecen colegiales en un patio de colegio -mis respetos a los colegiales-
siempre peleando, hablando, pero solucionando poco. Ellos viven la crisis de oídas,
con los sueldos que les pagamos creo que apenas la notan.
Un tirano allá por el mes de febrero decidió invadir Ucrania
en lo que él llama una operación especial, que no es
otra cosa que una declaración de guerra. Y así seguimos aún ahora y me temo que va para largo.
Se
celebró el mundial de fútbol en Qatar. Un país que no respeta los derechos
humanos, donde las mujeres y el colectivo LGTBI lo tienen imposible, pero la
FIFA miró hacia el otro lado y pidió respeto a las costumbres – respeto para
quienes no respetan-. Pero el dinero compra voluntades, como se ha visto.
Durante la celebración del mundial un jugador Iraní fue condenado por
defender los derechos de las mujeres de su país. Sus compañeros
de todo el mundo se mantuvieron callados. Futbolistas como él también miraron
hacia el otro lado y se lavaron las manos -muy valientes todos-.
Muchos
acontecimientos pasaron en 2022 y sin casi enterarnos ha llegado el año 2023 al
que pediremos muchas cosas y buenas. Unas se darán, otras no, pero mientras
tanto mantendremos la esperanza de un mundo mejor, aunque algunos se empeñen en
emponzoñarlo con su tiranía, ambición, ansias de dinero… Pero también habrá otras
personas que harán la vida más posible a los otros, que mostrarán el lado azul
de la vida, con su buen hacer, su entrega a los demás y nos harán sonreír haciéndonos
ver que la vida es bella y vale la pena vivirla.
“En la
Puerta del Sol, como el año que fue
Otra vez
el champagne y las uvas y el alquitrán
De
alfombra están”
Sin casi
habernos enterado el año nuevo llama a nuestra puerta. ¡Feliz año 2023! Lleno
de buenos momentos
Alberto López Escuer
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