HASTA LA DESTRUCCIÓN FINAL

 



El diario La Rioja”, en su edición del 22-2-2023, recoge unas declaraciones de Joe Biden y Vladímir Putin -se pueden leer en la fotografía que acompaña a este artículo- que dan verdadero miedo, a cuenta de la invasión de Ucrania. Ambos muestran su lado tenebroso, el presidente ruso lleva tiempo enseñándolo.

Si no fuera por la seriedad de la situación parecen dos adolescentes compitiendo a ver quien mea más lejos. Pero claro, sus retos implican al mundo entero. Hace tiempo que estamos en jaque por culpa de la ambición de algunos dirigentes.

En esta disputa pagarán los mismos, como en todas las guerras, los soldados que están en el frente, los civiles donde hay ancianos, niños y personas inocentes. Daños colaterales se les llama, qué capacidad de poner nombres que escondan la cruda realidad y no es otra que la muerte de personas que no deben. A Putin no se le ha puesto nada por delante para bombardear hospitales, matar a civiles y enterrarlos en fosas comunes en su delirio de hacerse dueño de Ucrania, pero la cosa me temo que no parará solo en ese país.

Tanto Biden como Putin dudo mucho que sufran en primera persona los desastres de sus decisiones. Ellos tienen bunkers donde refugiarse si llegase el caso. Ellos no tienen problema, en cambio sus respectivos pueblos y la sociedad mundial sí que puede echarse a temblar como a alguno de los dos le dé por apretar el botón nuclear. Las consecuencias serán terribles sin lugar a dudas.

Harán realidad esa frase que se le atribuye a Albert Einstein:

No sé con qué armas se peleará la tercera guerra mundial, pero la cuarta será con palos y piedras.

Están poniendo al mundo al borde del abismo, eso sí, si la tragedia se confirma la culpa será siempre del otro.

La escalada verbal tanto de uno como de otro empieza a dar miedo y más si cumplen sus amenazas.

Nos quieren llevar a la destrucción total, si nadie lo evita.

 

Alberto López Escuer

 

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