RAFAEL ÁLVAREZ “EL BRUJO”, MI VIDA EN EL ARTE

 

 

Cuando vas a un espectáculo de “El Brujo” te transportas en el túnel del tiempo a una época donde el verso embellecía a la sociedad y era escuchado. El verso es la excusa perfecta para que Rafael Álvarez despliegue todo su buen hacer interpretativo y humorístico.

Como dijo en la Casa de Cultura de Villava que es donde lo vi “El teatro es la ceremonia de la presencia”, y la presencia de este gran actor llena el espacio vacío que es el escenario. Lo llena de buena dicción, versos y muchas risas haciendo de su espectáculo una pieza vanguardista – clásica según propias palabras de “El Brujo”, es tan vanguardista que no sabes por dónde va a discurrir o qué derroteros va a tomar. Lo que está asegurado es en el escenario un actor, que allí donde va agota las localidades, un monólogo vivo y con mucha vida a diferencia de otros monologuistas, que sus actuaciones son guiones enlatados que no dan lugar a ninguna sorpresa. Sin embargo los espectáculos de “El Brujo” son todo lo contrario, son monólogos frescos de mucha calidad y que vuelan muy alto a caballo del humor y de la emoción.

“El Brujo” nos ofrece un repertorio de grandes versos -San Juan de la Cruz, Santa Teresa de Jesús o Quevedo , salpicados de historias que por mucho que parezcan increíbles alguna será verdad o no. Gestos y voces que hacen reír y que nos regala este juglar que está mostrando su arte entre los siglos XX y XXI que es como se le estudiará en las escuelas y universidades, pues no me cabe la menor duda que a Rafael Álvarez se le estudiará. Es un actor único en muchos aspectos, vive el teatro de una forma profunda y bella, nos transporta a otras épocas, nos muestra la grandeza de nuestros escritores como Miguel de Cervantes. Ha hecho mucho desde un escenario por dar a conocer la literatura de nuestro siglo de oro.

Nos hace reír, sus actuaciones son un puro divertimento lleno de cultura. Una manera preciosa de sumergirnos en nuestra rica historia cultura aunque a veces algunos la denosten, claro síntoma de ignorancia una epidemia muy extendida en nuestro país.

Siempre hay hueco para la actualidad y eso lo sabe aprovechar muy bien y con gran maestría “El Brujo”, lo hila muy bien con su espectáculo, en eso es un maestro.

“El Brujo”, como dicen los franceses, cada vez que sube a un escenario juega con su personaje de una forma brillante y nos hace disfrutar de un rato muy agradable. ¡Vayan a verlo no se arrepentirán!

Alberto López Escuer