Es una buena actriz, con
una trayectoria impecable y llena de buenos personajes. En constante evolución, siempre asumiendo retos
cada cual más complejo, ha ido creciendo de una forma exponencial. Las ocasiones
que he tenido de hablar con ella, siempre ha sido amable, cercana y simpática. La descubrí en la serie 7 vidas, hace
ya unos cuantos años. Luego la he visto varias
veces sobre el escenario, regalándonos interpretaciones
sublimes. Se ha convertido con el paso del tiempo en una de las grandes de la
escena de nuestro país. Cada uno de sus proyectos es sinónimo de calidad ya sea en
la televisión, el cine o el teatro. Cuando la veo encima de un escenario, recuerdo el
porqué me apasiona tanto el teatro, viendo actuar a actrices como ella siguen
alimentándome las ganas por ver, escribir y dirigir teatro.
Mucho se aprende viéndola actuar, escuchándola hablar en cualquiera
de las entrevistas que ha concedido. Transmite pasión por su oficio, también
serenidad y mucha ilusión. Nos emocionó cuando en la última edición de los Goya recogió el cabezón a la
mejor actriz. Había sido nominada en otras
ocasiones pero no lo había conseguido. Su discurso fue precioso,
estaba contenta como un principiante, agradecida, emocionada y llena de cariño
hacia los demás. Fue uno de los mejores discursos de la noche -junto al de José Sacristán Goya de
Honor – No ha perdido ni un ápice de la frescura, sigue
ganándonos el corazón a muchos.
Por eso parafraseando la
letra de una canción, si me dan a elegir me quedo contigo
Blanca Portillo.
Albert López Escuer
Comentarios
Publicar un comentario